Reproducción de ataifor de la Nao o de la nave – Pieza del mes – junio 2021
El reflejo metálico o dorado, fue la técnica más significativa y destacable en todas las vertientes cerámicas producidas en la España andalusí. Una técnica venida de Asia central y desarrollada efusivamente en al Andalus. Las producciones más notables son dispares en la península, habiendo centros de producción en diversos lugares de la geografía ibérica.
La loza dorada o de reflejos metálicos, conocida también como reflejo dorado, ópera Malika o cerámica andalusí de reflejo dorado, es un tipo de decoración esmaltada con efectos iridiscentes producidos por los óxidos metálicos aplicados en una tercera cocción sobre un esmalte ya cocido. La fórmula original de antaño, se desconoce, aunque hay fórmulas actuales que se acercan al resultado. Se trata de la cocción más delicada y complicada, siendo de obligado uso, un horno y maderas especiales para su cocción.
Iniciada en la Mesopotamia musulmana, la loza dorada se desarrolló también en el Norte de África y en la península ibérica. Un cierto velo de leyenda atribuye a los últimos alfareros de Marruecos y el levante español la posesión de su fórmula secreta. En España, identificada con la loza morisca, tuvo su mayor foco de producción en la zona de levante, desde la cerámica aragonesa de los alarifes mudéjares de Muel hasta el gran emporio de Manises.
El original se encuentra en el Victoria & Albert Museum de Londres.
Ficha Técnica
Título: reproducción de ataifor de la Nao o de la nave.
Datación original: siglo XV
Cultura: nazarí
Elaboración: conformado a torno, dos cocciones de bizcocho y esmaltado, y una tercera de reflejo metálico o dorado en horno de fuego, y azul cobalto con una nave portuguesa, según proclama la bandera que ostenta, con las consabidas quinas.
Tiene su origen en la Alcazaba de Almería.