Dentro de las disciplinas conocidas como Artes Aplicadas y Oficios Artísticos se encuentra el arte (u oficio) del «Vaciado y Moldeado». A estas alturas, muchas personas permanecen ajenas a los laberínticos caminos por los que transitan ciertas obras de arte escultóricas antes de ver la luz.
Mucho se había hablado sobre ese pequeño apéndice superior que se ve en numerosas asas de diversas piezas andalusíes, y que hoy en día seguimos viendo en las piezas elaboradas exclusivamente por las alfareras del Rif.
Dentro de las disciplinas conocidas como Artes Aplicadas y Oficios Artísticos se encuentra el arte (u oficio) del «Vaciado y Moldeado». A estas alturas, muchas personas permanecen ajenas a los laberínticos caminos por los que transitan ciertas obras de arte escultóricas antes de ver la luz.
Los desventurados proscritos del arrabal de Córdoba arrebataron a Bizancio, en el año 827 d. C., la isla de Creta y, en los años siguientes, otras muchas islas del Egeo —especialmente las Cýcladas— (Además de Creta, llegaron a formar parte del emirato las islas de Thera -actual Santorini-, Paros, Naxos, Kíthera, Sifnos, Astypálaia, Anydros, Íos, Melos, etc. Incluso Egina les perteneció, frente a Atenas; esta fue su posesión más cercana al Bizancio continental).
De la torre de Santa María de Tauste (Zaragoza, Aragón) siempre se dijo que era mudéjar, construida en el siglo XIII como campanario de la iglesia del mismo nombre. Se trata de una esbelta edificación de planta octogonal y 47 metros de altura, construida toda ella con ladrillo asentado de yeso, ubicada a los pies del templo.
El alzamiento de los cordobeses contra el emir en marzo de 818 tuvo fatales consecuencias. Tres días duraron los incendios, la matanza y el saqueo. Dos mil ciudadanos murieron en las refriegas, parte de ellos arrastrados por las aguas del Wãdi al-Qabir (el Río Grande), y trescientos cabecillas fueron crucificados en el puente, en los arrecifes Suhbullãr y de los Tablajeros, llegando las cruces hasta las primeras almazaras.
El emirato cretenseandalusí tuvo su origen en Córdoba en el mes de Ramadán de 202 de la Hégira (marzo de 818 d.C.). Por entonces la capital de al-Ándalus andaba revuelta, en especial el arrabal de Sequnda o de Mediodía, situado en la orilla izquierda del río y llamado así por hallarse comprendido dentro de las dos millas al sur, medidas desde la medina.
El trabajo en cuero de Juan J. García Olmedo se inspira en motivos decorativos de Al-Ándalus, especialmente elementos arquitectónicos de Medina Azahara.
Durante su niñez, a Sy Hassan le gustaba visitar el taller de Fez donde trabajaba su padre, maestro tejedor del tejido de seda brocado.
Juan José García Olmedo nos cuenta la influencia que tuvo la estética nazarí en su trabajo en cuero con ejemplos de las ajaracas o lacerías de los azulejos nazaríes
Con el paso de los siglos las almojábanas, este panecillo dulce han ido evolucionando y adoptando nombres distintos desde época andalusí pero ninguna otra elaboración culinaria de esta época gozó de tanta popularidad y fue tan consumida por igual entre las tres religiones andalusíes, ni se extendió en el tiempo y por la geografía hispana. A la almojábana, Ibn-Zamrak se refería en su poema como: un cuerpo trémulo, blanco como el queso y frito.