De Egipto a Cundinamarca pasando por Toledo

Con el paso de los siglos las almojábanas, este panecillo dulce han ido evolucionando y adoptando nombres distintos desde época andalusí pero ninguna otra elaboración culinaria de esta época gozó de tanta popularidad y fue tan consumida por igual entre las tres religiones andalusíes, ni se extendió en el tiempo y por la geografía hispana. A la almojábana, Ibn-Zamrak se refería en su poema como: un cuerpo trémulo, blanco como el queso y frito.