Azulejos de La Alhambra “Lindaraja” – Pieza del mes – abril 2021
En La Alhambra de Granada podemos encontrar este diseño geométrico aplicado en distintos lugares: tanto en esplendidas techumbres de madera como para conformar diversos alicatados cerámicos. Particularmente yo he querido reproducir los zócalos situados en las jambas de acceso a la Sala de Dos Hermanas y en el Mirador de Lindaraja. Aunque existen geometrías mucho más complejas dentro del “gran libro de diseño” que es La Alhambra, este patrón representa muy bien los conceptos, el simbolismo y la expresividad del color que nos transmite todo el palacio.
En efecto, La Alhambra entera (en su planteamiento arquitectónico) y cada pequeño detalle de su decoración se asientan en un orden sometido a las leyes de la geometría y los cánones de proporcionalidad clásicos, así la geometría se hace dinámica (e inconmensurable) no solo por la multiplicidad de patrones que se generan sino porque, en ese generar, nacen también las infinitas formas o figuras que trascienden al concepto (y a la medida), adquiriendo valores simbólicos. El octógono salomónico, símbolo a veces oculto en la ciudad palatina, se representa con los sinos de 8 (que inscribe) y, en nuestro trazado de Lindaraja, estas estrellas de 8 puntas a la vez desarrollan ruedas de “zafates” que configuran nuevos octógonos… y así sucesivamente puesto que la posición de estas ruedas muestra un nuevo octógono inscrito en el cuadrado modular.
En cuanto al color, a pesar de la aparente libertad cromática y profusión del contraste tonal, nuevamente imperan el orden y el ritmo, ahora cromático. De color vestimos u ocultamos la geometría subyacente y creamos una nueva ¿geo-sinfonía?: el peso del estático y grave color negro se ve atacado por los cálidos (verdes y miel) que además bailan asimétricos para dinamizarlo, rompiendo su rigor, como un diálogo entre flautas y oboes, logrando un verdadero equilibrio en la alternancia tonal.
Ficha Técnica
1º. Trazado del patrón geométrico y definición de figuras según la escala requerida
2º. Corte manual de piezas en crudo y bizcochado a 1030 ºC
3º. Esmaltado manual (por baño) en los diferentes colores que son formulaciones propias buscando los tonos y cualidades de la cerámica nazarí.
4º. Cocción de los vidriados a 980 º C
5º. Conformación de módulos para colocación: sistemas de pre-montaje que presentan las composiciones de azulejos ya ajustados formando módulos (30 – 50 cm) que encajarán entre sí para completar cualquier superficie.