La influencia de la Alhambra de Granada y otras construcciones de Al-Andalus en América produjeron a lo largo del siglo XIX y primeras décadas del 20 una arquitectura orientalista, muy exótica por los lugares donde se realizó que abarcan desde Argentina hasta los Estados Unidos.
La Casa Román en el barrio de Manga de la ciudad colombiana de Cartagena de Indias supone, pese a su lejanía, un ejemplo señero de la difusión de los modelos alhambrescos en América.